En la vida, como en el arte, improvisar algo siempre está bien. Pero incluso en profesiones creativas como el marketing, un poco de orden y planificación es necesaria y te puede ayudar a cumplir mejor y más rápido tus objetivos. Cuando se trata de dinero, el orden es mucho más importante ya que un error te puede costar muy caro.
Por eso, cada vez que tengas que enfrentar un nuevo año, un nuevo mes o incluso una nueva campaña de marketing, tan importante como los contenidos, las herramientas y los canales a elegir, será el presupuesto que tienes que destinar a cada una de las partidas. El presupuesto va mucho más allá del dinero que meterás en promocionar publicaciones en Facebook, Instagram o Google (aunque esa cantidad deberá ser importante y estar muy bien pensada).
Estos son algunos pasos que debes seguir para crear un buen presupuesto que te ayude a llegar a los objetivos esperados.
Revisa tus finanzas:
En el mundo ideal, haríamos nuestro plan de marketing y a raíz de eso pediríamos el dinero que necesitáramos para poner en marcha lo planificado. Lo mejor es empezar al revés y partir de la situación financiera general de la empresa. Una vez sepamos la cantidad que podemos destinar a nuestro plan, empezaremos a ver como distribuimos los recursos. Te evitará muchas frustraciones y dolores de cabeza.
Identifica los gastos fijos:
Una cosa es el costo que tendrá tu plan de marketing en concreto y otra muy distinta es el costo fijo mensual que la empresa tiene para funcionar. Para poner en marcha esa campaña puedes ir variando los recursos destinados a publicidad, pero difícilmente cambiarán los salarios de las personas contratadas para que el plan se lleve a cabo.
Define tu presupuesto de campaña en base a los objetivos:
Ahí debes concluir una cosa: ¿dónde necesito gastar más para lograr lo que quiero? Ahí aparecerán gran cantidad de opciones como:
- Software de monitoreo, diseño o medición.
- Publicidad en medios tradicionales y digitales.
- Eventos y esponsorización.
- Gastos en externalización de servicios con agencias de publicidad, diseño o relaciones públicas.
- Mantenimiento de página web y blog.
- Generación de contenidos para blog, redes sociales y otros canales.
- Diseño gráfico de materiales.
- Merchandising.
Estos son solo algunas de las partidas a considerar, pero seguramente a medida que comiences a tomar decisiones, tendrás que variar y corregir el rumbo. Por eso, siempre deja una buenas partida destina a imprevistos.
Es importante que intentes medir todo lo que durante la campaña puede suponer un gasto. Debes estimar lo más exacto posible el costo. Es mejor que pongas cifras hacia la estimación más alta, ya que siempre es más fácil mover recursos de una partida a otra, que encontrarte con la necesidad de buscar recursos que no estaban contemplados para poder realizar las acciones previstas.
Ahora que ya tienes identificadas las partidas y el costo de cada una, ordénalas en un software o en una tabla de Excel por semanas o meses. Ahí deberás ir revisando periódicamente que todo va según lo previsto. Sabrás cuánto debes gastar, cuánto has gastado y cuánto queda. Si las cosas no van según lo previsto, toma decisiones antes de que sea tarde.
A la hora de realizar un presupuesto es tan importante identificar bien las partidas como el costo de cada uno. Pero no te dejes llevar solo por los números y mide la efectividad de cada acción que vas tomando. Eso te permitirá corregir a tiempo un mal contenido o mover los recursos de una publicidad a otra antes de tirar todo el dinero sin lograr nada de efectividad.
Ahora que ya sabes como realizar tu presupuesto, crea el tuyo y comienza a cumplir con tu plan paso a paso.
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