Si tu meta es ganar dinero a través de la página web de tu empresa, tu experiencia de usuario es la mejor guía, tu propio conocimiento en navegación es importante.
Esto porque debes desarrollar un sitio web pensado en tus usuarios, eso significa hablar su lenguaje, orientarlos en la navegación y lograr una excelente interacción con ellos.
Requiere además convertirte en un experto de la persuasión para que tus usuarios se conviertan en clientes. Esto es posible si a tu sitio le inyectas cualidades como diseño atractivo, imágenes de impacto, opciones óptimas de atención al cliente, contenido y que se vea confiable y seguro.
"Mantener una presencia atractiva y efectiva en internet te ayudará a que tus clientes actuales y futuros vean a tu empresa como experta"
En cuanto a la parte comercial, el sitio web de tu empresa debe formar parte de tu estrategia digital. Su diseño y creación deben incluir un buen contenido que posea palabras clave. Además necesitas contar con una buena indexación en motores de búsqueda que te lleve a buen SEO y tener un buen Search Engine Marketing o SEM, el cual equivale a campañas de anuncios dentro de los buscadores.
La moda es otro factor que influye en el éxito y rentabilidad de tu página. Así como las tendencias cambian en el mundo real, también evolucionan en el mundo virtual. Por eso necesitas estar actualizado tanto en colores, imágenes, navegación y elementos que le dan popularidad a tu sitio.
En concreto, necesitas dar estos tres pasos para lograr más consumidores por medio de tu página:
"Internet es una economía basada en la atención donde la moneda de cambio es el tiempo del ususario"
-Jakob Nielsen
¿Qué es la conversión?
Si tu sitio web no te genera todos los negocios que esperabas, es probable que no hayas logrado la tan anhelada conversión. Este concepto en el mundo virtual significa que tus visitantes pasen al siguiente escalón: ser tus clientes. En ese sentido la conversión se enfoca en lograr dos objetivos principales: prospectar o vender. Cuando se trata de la primera meta lo que obtienes son datos de quienes visitan tu página: nombre, género, edad y correo electrónico.
En cambio el segundo objetivo es más agresivo, pues pretende que el usuario a través de filtros sea conducido a realizar la compra. Aunque suena sencillo no lo es del todo, pues debes acompañarlo a través del proceso natural de compra:
Dar inicio a este recorrido requiere de claridad en tus propósitos, por ejemplo: ¿qué quieres que haga el usuario al llegar a tu página? Suscribirse para recibir boletines, que sea un prospecto, te interesa que pruebe el demo de tu servicio o que compre tu producto. Al final, tu objetivo primordial debe ser capitalizar tus esfuerzos digitales para generar una base de datos y ser más efectivo en el cierre de ventas.
En resumen la metodología Inbound marketing puede ayudarte muy bien en este proceso, empieza a atraer clientes calificados a tu página web mediante contenido de valor y gana más ventas.
Da el primer paso para aumentar tus ventas con la metodología Inbound Marketing.